El 7 de agosto de 1990 se posesionaba el hoy Secretario General de la OEA, César Gaviria Trujillo, como Presidente de Colombia y declaraba con euforia: "¡Bienvenidos al futuro!". Doce años después, el pasado 23 de septiembre de 2002, en entrevista sostenida con el actual Presidente, Álvaro Uribe Vélez, durante su visita a Washington, el jefe de la misión del FMI, expresó: "Nos parece que Colombia se está asegurando hacia el futuro". Durante más de una década, para no ir más atrás en la historia reciente, las élites gobernantes le han anunciado a la población colombiana que los orientaciones de la política económica tendrían el propósito de encauzar al país por la senda del crecimiento económico y el bienestar de la sociedad. Entonces, se formuló el programa de "apertura económica y de modernización del Estado". Ahora, se trata de la renovación y prolongación, por dos años más, en la forma de acuerdo stand by, del "convenio" extendido por el gobierno de Colombia con el Fondo Monetario Internacional en el segundo semestre de 1999. Tal acuerdo es parte integral de lo que se conoce pomposamente como el proyecto de la "seguridad democrática", uno de los pilares del "Estado comunitario" en construcción, al decir del gobierno de Uribe Vélez.